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Mapa de contaminación lumínica en Murcia.

El cielo oscuro: un derecho de la humanidad (2ª parte)

REGION DE MURCIA. ¿QUIÉN NOS HA ROBADO LA VÍA LÁCTEA?

La práctica totalidad de los habitantes de la Región de Murcia viven bajo un cielo nocturno contaminado, siendo la Contaminación Lumínica particularmente intensa en las comarcas del Campo de Cartagena y del Mar Menor, municipio de Murcia y limítrofes, Lorca, Totana, Yecla y alrededores de estas poblaciones, de forma que un 75% de la población de la Región, ha perdido la visibilidad a ojo desnudo de la Vía Láctea. Es un hecho pues que la mayoría de los niños y niñas, y jóvenes, de la Región de Murcia no han visto nunca la Vía Láctea, desconocen la belleza del cielo nocturno e ignoran expresiones populares, habituales para nuestros padres o abuelos, como el Camino de Santiago (la Vía Láctea), las Tres Marías (el cinturón de Orión) o las Cabritillas (el cúmulo de las Pléyades). Contrasta fuertemente esta situación, y da idea de lo rápido del deterioro del cielo nocturno, con la de hace poco más de dos décadas cuando todavía era visible la Vía Láctea, nuestra galaxia, a escasos kilómetros de Murcia capital.
Sin embargo, y a pesar de todo, se siguen financiando renovaciones y nuevas instalaciones de alumbrado sin adoptar ninguna medida que evite la Contaminación Lumínica, ni se regule al respecto.

Existe un gran "cordón de luz" que se extiende ininterrumpidamente desde Almería hasta Valencia, y abarca prácticamente la totalidad de las provincias de Murcia, Alicante y Valencia.
En el mapa, el gris más oscuro representa las áreas que tienen cielos aun puros en el cénit, pero contaminados hacia el horizonte en alguna dirección y, por tanto, tienen un claro riesgo de dejar se ser puros pronto. Los tonos restantes implican cielos contaminados, cada tono tres veces más brillante que el anterior. El blanco representa cualquier cielo que supere en más de 27 veces la luminosidad natural que tiene el cielo nocturno. En concreto: - Azul. Se detecta algo de brillo artificial por toda la bóveda celeste.
- Verde. El brillo artificial equivale al natural. Aproximadamente la luminosidad que proporciona la aparición de la Luna en cuarto creciente.
- Amarillo. El brillo artificial dobla al natural. Como si hubiera permanentemente Luna creciente alta en el cielo.
- Naranja. Como tener Luna llena todo el año. La Vía Láctea es prácticamente invisible.
- Rojo. Imposible ver la Vía Láctea. El número de estrellas visibles en buenas condiciones atmosféricas se reduce a un centenar. Se empieza a alcanzar el umbral de adaptación del ojo a la visión nocturna. - Blanco. El ojo no puede adaptarse a la visión nocturna. Sólo son visibles unas pocas estrellas muy brillantes y los planetas.

¿QUÉ HACER?
Individualmente puedes divulgar el problema de la Contaminación Lumínica, sus efectos y su solución, así como denunciar cualquier uso irracional del alumbrado exterior. También puedes asociarte a organizaciones implicadas en la defensa, protección y mejora del cielo nocturno como CELFOSC.
Por otra parte, nuestros representantes políticos tienen la responsabilidad, tanto política como ética, de poner en práctica las medidas necesarias que permitan eliminar la Contaminación Lumínica y así hemos de exigírselo.
Según el IDAE, el funcionamiento de todas las luminarias repartidas por el Estado suponen el 42% del consumo de energía del sector de servicios públicos, y la inversión en su mejora ahorraría un 30% de este consumo. Dado que el 95% del consumo energético de este sector corresponde a instalaciones propiedad de los Ayuntamientos, es fundamental lograr que estos garanticen una adecuada iluminación, y dispongan de ordenanzas municipales donde se establezcan las condiciones que deben cumplir las instalaciones de alumbrado exterior. A nivel autonómico, es prioritario conseguir la promulgación de una ley autonómica contra la Contaminación Lumínica.

Ver mapa de contaminación lúminica en España y Murcia.

Artículo de la Universidad de Murcia.

18/11/2007 19:19:01