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Maddox descubre el camino.

Maddox es un chico huérfano (sus padres murieron en un incendio y él sobrevivió milagrosamente) al que su tía Ada decide enviar a un campamento de invierno para que se relacione con otros chicos y chicas de su edad. Pero él, que es un solitario recalcitrante, que adora contemplar las estrellas y hacer malabarismos con pelotas de colores, no lo encaja bien.

Una noche, después de mostrarse bastante grosero con Raquel, una chica que trata de resultar simpática, una sombra enorme y oscura empuja a Maddox al fondo de un pozo. Y cuando consiguen rescatarlo tiene un pie roto, repite de forma obsesiva la palabra ¿Aldebarán¿ y ha escrito la palabra ¿Wik¿ en su cuaderno. Este cúmulo de detalles extraños comenzará pronto a girar alrededor de Maddox, y lo encauzará en una dirección que él no espera. Naledi (una mujer ciega de avanzada edad, que es vecina de Maddox y que actúa como consejera y amiga suya), Wiktor (un chico vehemente que trabaja en un circo), el misterioso e inquietante Mahgul (del que apenas sabemos nada más que el nombre, porque no llega a aparecer en la obra), la solícita pelirroja Raquel (que a toda costa quiere hacerse amiga de Maddox, y que trata de convertirlo en un chico sociable) y otros personajes cuya aparición es menos intensa pero igualmente decisiva, van tejiendo un fresco colorista, ameno y sugerente, donde la astrología, el misterio, el Destino y los seres mitológicos se van combinando ante los ojos del lector, que aprende desde las primeras páginas a gozar el conjunto sin reservas. Germán Tejerina y Daniel Muñoz completan la propuesta con algunas ilustraciones muy logradas. Care Santos, autora señaladísima de nuestro panorama literario (y que lo mismo consigue premios juveniles como el Gran Angular o el Edebé, que resulta finalista del premio Primavera), ha concebido una serie de doce obras bajo el título genérico de ¿Arcanus¿, que se inicia con esta obra protagonizada por Maddox y que continúa con ¿Wiktor hipnotiza a las fieras¿ y con ¿Ekki domina las tinieblas¿, de las que daremos cuenta en comentarios sucesivos. Y conociendo a la autora no nos puede caber duda de que el proyecto obtendrá un éxito fulgurante y merecido, porque la autora controla con eficaz pulso los mecanismos de la seducción literaria. Care Santos disfruta escribiendo y hace que sus lectores disfruten leyendo. Es la magia absoluta y definitiva. Rubén Castillo Gallego Maddox descubre el camino Care Santos Destino 176 páginas

13/11/2007 17:08:46