CALASPARRA EN NORUEGA

El IES Emilio Pérez Piñero visita la ciudad noruega de Kristiansand durante el proyecto Comenius que coordina

Una delegación del IES Emilio Pérez Piñero, formada por tres alumnas y tres profesores, viajó a Kristiansand (Noruega) el pasado mes de Septiembre, con motivo del tercer encuentro programado en su proyecto multilateral Comenius llamado “Didactics of Foreign Languages in the Compulsory Secondary Education (Didáctica de la Lenguas Extranjeras en la Educación Secundaria Obligatoria)”. En el proyecto participan cinco centros educativos y el coordinador es el IES Emilio Pérez Piñero de Calasparra. Los otros socios son de los siguientes países: Turquía, Croacia, Noruega y Alemania.

El pasado mes de septiembre, una delegación del IES Emilio Pérez Piñero formada por tres alumnas y tres profesores viajó a Kristiansand (Noruega) del 22 al 28, con motivo del tercer encuentro programado en su proyecto multilateral Comenius llamado “Didactics of Foreign Languages in the Compulsory Secondary Education- Didáctica de la Lenguas Extranjeras en la Educación Secundaria Obligatoria”.

Este proyecto tiene una duración de dos años y está enmarcado dentro de los programas de aprendizaje permanente de la Unión Europea; en concreto, forma parte del programa Comenius que tiene como objetivo reforzar la dimensión europea en el campo de la educación, promoviendo la movilidad y la cooperación entre centros educativos.

En el proyecto participan cinco centros educativos y el coordinador es el IES Emilio Pérez Piñero de Calasparra. Los otros socios son de los siguientes países: Turquía, Croacia, Noruega y Alemania.

Con este proyecto se pretende analizar y comparar los diferentes sistemas educativos, así como la actitud de cada país hacia los idiomas, y todos los aspectos que intervienen en el proceso de enseñanza y aprendizaje de un idioma extranjero. En España, nuestros alumnos comienzan a aprender inglés a los tres años, mientras que nuestros socios comienzan mucho más tarde, y los resultados muestran que nuestros alumnos no se comunican en inglés tan bien como lo hacen los alumnos noruegos, alemanes o croatas; por tanto, algo está fallando en nuestro sistema educativo, en el medio familiar y en el social.

El objetivo final del proyecto es la elaboración de unas recomendaciones metodológicas y actividades que se puedan implementar en las aulas y, con ello, mejorar la competencia comunicativa de nuestros alumnos.

En esta visita a Noruega, se ha revisado el trabajo realizado en meses previos, analizando y reflexionando los resultados de una encuesta realizada a alumnos, padres y profesores sobre la actitud hacia el aprendizaje de una lengua extranjera. Se ha llevado a cabo la evaluación del primer año del proyecto y se han establecido las líneas de actuación para este segundo año.

Después de visitar Kristiansand, nos hemos dado cuenta de que el sistema educativo noruego, considerado como uno de los mejores junto con el finlandés,  no es tan idílico como pensábamos y está sometido continuamente a debate, ya que la inversión es muy alta y no obtienen los resultados deseados.

En Noruega, el inglés no está considerado como una lengua extranjera, sino como una segunda lengua, ya que está muy presente en toda la sociedad, ejemplo de ello es que nos encontramos con que todo el mundo era capaz de hablar inglés, desde un conductor de autobús a un albañil. Quizá la razón radique en que el noruego es hablado por tan solo 5 millones de habitantes y por tanto es una lengua minoritaria, y tienen la necesidad de hablar una segunda lengua para poder viajar y comunicarse sin problemas. Muy importante también es que no doblan las películas y las ven en versión original subtituladas en noruego, de esta forma motivan a los niños a iniciarse a la lectura para poder comprender lo que ven en la tele.

Algo que nos ha llamado mucho la atención de nuestra visita al instituto Holte es que todos los viernes los alumnos se reunían en una especie de anfiteatro para ver las noticias todos juntos, cogían notas y posteriormente iban a sus clases para comentar las noticias con su profesor.

Los periodos lectivos no son de 55 minutos como en España, sino de 45 y ellos tienen un descanso de diez minutos entre clase y clase. Los profesores no imparten solamente una asignatura, sino un mínimo de dos y al mismo nivel. Cada mañana se coordinan los profesores que imparten clase a un mismo grupo para tratar el mismo tema desde varias materias, es decir, a través de competencias básicas.

Por supuesto, no existe ningún tipo de vallado que impida a los alumnos fugarse las clases, también es cierto que el absentismo escolar en Noruega esta más controlado y los padres pueden ser sancionados por ello.

La experiencia ha sido enriquecedora y muy grata, hemos compartido una semana con profesores de diferentes países y hemos participado en las actividades propuestas por el país anfitrión, sintiéndonos totalmente integrados en el medio. También hemos disfrutado de los increíbles paisajes noruegos, rodeados de bosques y agua, con sus bonitas casas de madera de colores, hemos pescado y cocinado nuestra propia cena al más puro estilo noruego.

19/11/2013