EL MANTENIMIENTO
DE LA ESPECIE. LA REPRODUCCIÓN ANIMAL
Y VEGETAL: ANALOGÍAS Y DIFERENCIAS. COORDINACIÓN,
RELACIÓN Y ADAPTACIÓN
Los seres vivos son frágiles.
La vida desaparece con cierta facilidad.
La muerte de los seres vivos está siempre
presente, sobre todo en los seres vivos
más complejos. Los organismos deben realizar
muchos esfuerzos y dedicar gran parte
de su energía a conservar su propia vida.
Sin embargo, desde el punto de vista de
la naturaleza, que un individuo sobreviva
o muera carece de importancia, siempre
y cuando se mantenga la ESPECIE. En otras
palabras, para la Evolución y la Naturaleza,
la supervivencia del grupo está por encima
de la supervivencia de los individuos
aislados:
El mantenimiento de la especie está por encima del mantenimiento del individuo.
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Para que la especie se mantenga
en el tiempo es necesaria la función de
REPRODUCCIÓN, que es la encargada de dejar
nuevos individuos a las siguientes generaciones.
Ahora bien, para que se puedan reproducir,
los seres vivos necesitan vivir al menos
hasta que se haya producido la fecundación,
y en muchos casos hasta que se haya dado
el desarrollo embrionario, y es para garantizar
esa supervivencia que se precisan las
funciones de NUTRICIÓN, RELACIÓN y COORDINACIÓN.