SOLIDARIDAD o DAR LO DEBIDO A LA SOCIEDAD.
En el sentido que aquí damos a la palabra solidaridad
incluimos primero la participación activa en la vida política, votando
referendums, elecciones primarias, listas abiertas, etc. (Democracia
participativa; en nuestra terminología "Pancracia" o gobierno
de todos). Lo debido a la sociedad no se agota en las votaciones
generales cada varios años, que es el mínimo exigido por el valor
más bajo y de respeto etiquetado como "Democracia".
Debemos
en segundo lugar a la sociedad obediencia civil a las leyes aprobadas
de acuerdo con los valores más bajos de Democracia y Pancracia.
Si se han respetado estos dos valores de método, y no se legisla
contra ningún otro valor más bajo, las leyes se suponen justas y
deben ser respetadas. No hay que obedecerlas por miedo a la coacción
penal, sino para vivir este valor de obediencia civil.
Si el contenido de una ley viola un valor más bajo no debe ser
obedecida,y llegado el caso se debe practicar la objección de conciencia
hasta soportar el castigo injusto.
En tercer lugar, debemos a la sociedad nuestra colaboración económica,
el trabajo con que nos elevamos nosotros mismos como personas morales
y contribuimos al progreso social. El que no trabaja vive a costa
de los demás. No hay que trabajar porque pagan, sino porque es un
valor. Como ocurrió con Igualdad y Suficiencia, también aquí lo
jurídico-político es condición necesaria para que funcione lo económico.
Por eso el Trabajo es más alto que los valores de participación
política y obediencia a las leyes justas.
|