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Grecia
Los griegos y el arte [Autoevaluación]

Arcaico

Período arcaico (610-500 a. C.) En esta fase asistimos a un extraordinario progreso artístico. La escultura de esta época presenta los siguientes caracteres generales: Predominio de la figura humana sobre las representaciones Galería de imágenes Dórico -Arcaico Kuros Kore Moscóforo -Severo Poseidón Auriga de animales, que tenían en el arte oriental gran importancia. En cambio, en el mundo griego el hombre se convierte ya en el eje del arte. Las esculturas son de tamaño natural en su mayoría, con tendencia en algunas hacia lo colosal. Se representa el desnudo masculino como exaltación de la belleza física, mientras que no aparece el desnudo femenino. La escultura comparte rasgos con el arte oriental: frontalidad, hieratismo, estatismo, pero con una tendencia progresiva hacia el naturalismo. Las principales esculturas griegas de este periodo son:  Reconoce obras griegas arcaicas Los Kuroi son esculturas propiamente arcaicas. Son estatuas de atletas desnudos, que a veces han sido considerados como Apolos.  Son representados para ser vistos de frente, como en el arte egipcio, y en ellos el movimiento es mínimo, apenas esbozado por una pierna que se adelante levemente a la otra. Las korai eran representaciones de doncellas, que se dedicaban como exvotos en el recinto de la Acrópolis. Los Moscóforos o boyeros eran estatuas que representaban un pastor con un carnero en sus espaldas. También a este periodo arcaico corresponden las primeras construcciones de templos dóricos, especialmente en la Magna Grecia (Sicilia y el Sur de Italia): Siracusa, Selinonte, Acragas, Segesta. Período de transición o estilo severo (500-450 a. C.) En los últimos tiempos del arcaísmo los escultores avanzan tanto en la representación de la figura humana en movimiento que intentan el complicado problema de componer grupos que decoren los frontones de los templos. La forma triangular del frontón obligará a los escultores a colocar las figuras en las más variadas actitudes. Los dos primeros frontones conservados son los del templo de Afaia en Egina y los del templo de Zeus en Olimpia. Otra novedad será la realización de grandes grupos realizados a partir de la técnica de fundición en bronce, que alcanza cotas difícilmente superadas posteriormente. En este campo es complicado destacar una obra maestra, puesto que conservamos magníficos ejemplos como el Poseidón del cabo Artemisión, el grupo de los Tiranicidas o los bronces de Riace. Sin embargo, podríamos quedarnos con el Auriga de Delfos, que es lo único que conservamos de un grupo dedicado a Apolo por el tirano Polyzalos de Gela (Sicilia).