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Grecia y su
legado Mito y
religión. [Autoevaluación]
Principales héroes o semidioses. El
ciclo troyano: Aquiles
El ciclo Troyano recoge un
conjunto de mitos relativos a la Guerra de Troya (también
llamada Ilión) y el regreso ("nostoi") a la patria de los
héroes que intervinieron.
A él
pertenecen los mitos en torno a la boda de Tetis y Peleo, el
juicio de Paris y las hazañas de los héroes Aquiles, Agamenón,
y Odiseo.
Las
fuentes escritas más antiguas para conocerlos son los poemas
de Homero:
- la Ilíada acerca de la cólera de Aquiles por
causa de una afrenta del rey Agamenón,
- y la Odisea, sobre el regreso de Ulises a
Ítaca (c. s. VIII a. C.)
También el
poeta trágico Esquilo dedicó su trilogía la Orestiada a la
muerte de Agamenón a manos de su mujer y su amante a su vuelta
al reino de Micenas (s. V a. C.).
Fundamentalmente, el mito narraba lo siguiente:
- Todo tuvo su origen en las bodas de Tetis y Peleo y
en la venganza de Eris, la diosa de la discordia, resentida
por no haber sido invitada a la fiesta. Al arrojar en medio
de los comensales una manzana de oro para la diosa más
bella, tres de las inmortales más poderosas se la
disputaron: Hera, Atenea y Afrodita. De este enfrentamiento
salió victoriosa Afrodita. Le concedió tan alto honor Paris,
un joven pastor troyano nombrado como árbitro por Zeus. A
cambio, recibió de la diosa la promesa de que conquistaría
el amor de Helena, reina de Esparta y mujer de Menelao, el
hermano de Agamenón. La bella Helena fue seducida por Paris,
hijo de Príamo, que la llevó consigo, en su nave, hasta
Troya.
- Los reyes griegos se unieron luego bajo el mando de
Agamenón para vengar la afrenta y recuperar a Helena.
Tardaron diez años en tomar la ciudad amurallada de Troya
tras un tenaz asedio.
- Odiseo, el astuto, fue quien ideó, en el mito, el
truco que permitió la conquista de Troya, la invención del
caballo de madera, en el que se escondieron unos cuantos
guerreros que, cuando los troyanos lo introdujeron en la
ciudad, abrieron sus puertas para la conquista.
- Los sobrevivientes tuvieron un penoso regreso a sus
hogares: así Ulises, que anduvo errante por el mar diez años
antes de regresar definitivamente a su patria Ítaca, o
Agamenón, que murió asesinado por su propia mujer y el
amante nada más pisar el suelo de Micenas.
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