3.2.1 El control de audio (continuación 1)
Giradiscos o platos
Con la aparición de los discos compactos y su correspondiente aparato
reproductor, es evidente que los giradiscos o platos se han dejado prácticamente
de utilizar en las emisoras de radio. Esto no quiere decir que no deban
de ser instalados, puesto que todavía son muchas las creaciones
musicales registradas en vinilo que sólo pueden ser reproducidas
en un giradiscos.
Reproductores-grabadores de discos compactos
El reproductor de CDs ha sido, sin duda alguna, el aparato técnico
que más se ha impuesto en la realización radiofónica
en los últimos años. Su fácil manejo, su rapidez
a la hora de buscar un corte musical y su calidad de reproducción
lo han convertido en un elemento estrella. Con el avance tecnológico
se ha conseguido que estos equipos, además de reproducir, también
sean capaces de grabar, haciéndolos aún más interesantes.
Magnetófonos de cassette y magnetófonos de bobina
abierta
Al igual que los giradiscos o platos, los magnetófonos, ya sean
de cassette o de bobina abierta, y también las llamadas cartucheras,
han pasado a un segundo plano en la realización radiofónica.
Durante muchos años, estos equipos han sido piezas vitales en la
reproducción y grabación de programas de radio. Ahora, sin
embargo, el estrellato de la reproducción y la grabación
lo ostentan los aparatos digitales como los reproductores-grabadores de
mini-disc y los ordenadores. Igualmente, a pesar de su poco uso, es necesario
contar en un control de audio con magnetófonos por si fuera necesario
reproducir alguna fuente de sonido que estuviera grabada en cassette o
bobina abierta.
Reproductores-grabadores de mini-disc
Como ya hemos mencionado, los reproductores-grabadores en mini-disc han
ganado terreno a los magnetófonos tradicionales. Al igual que el
lector de CDs, este aparato ofrece facilidad de manejo, calidad
digital en la grabación y la reproducción y rapidez en la
búsqueda de las fuentes de sonido registradas dentro del mini-disc.
Ordenadores: gestión automatizada de una radio
Sin lugar a dudas la incorporación de la informática ha
revolucionado el mundo de la radio. Desde que los ordenadores irrumpieron
en los estudios de control de audio podemos asegurar que hay un antes
y un después en la gestión del audio radiofónico.
Los programas informáticos diseñados por y para las emisoras
de radio permiten grabar y manipular el sonido, reproducir de forma automática
sonido previamente grabado, controlar la emisión en directo, pautar
y seleccionar una emisión musical, gestionar la discoteca de una
radio e incluso realizar la facturación, el control y la gestión
publicitaria.
El aspecto más revolucionario de la incorporación de los
ordenadores a la radio ha sido el hecho de poder llegar a automatizar
toda una emisión, consiguiendo que funcione sin la presencia física
de una persona.
En resumen, podemos asegurar que los ordenadores y su paquete informático
son un elemento imprescindible en la radio del siglo XXI.